La infecciosidad identifica a aquellos residuos capaces de provocar una enfermedad infecciosa. El residuo, contiene potencialmente, MICROORGANISMOS PATOGENOS, con suficiente virulencia y en tal cantidad, que la exposición al mismo por parte de un huésped susceptible puede derivar en una enfermedad infecciosa.
Entre los distintos tipos de residuos patológicos podemos nombrar: jeringas, guantes usados, restos de sangre, fluidos humanos y de animales, restos de órganos, elementos corto-punzantes contaminados y todo aquel material que haya tenido contacto con microorganismos potencialmente patógenos.
Los residuos patológicos se originan:
• En hospitales, clínicas de atención médica u odontológica, maternidades, laboratorios de análisis clínicos e investigaciones biológicas, clínicas veterinarias.
• En general, podemos decir que, se generan en centros de atención de salud humana y animal, centro de investigaciones biomédicas y en los que se utilicen animales vivos.
Las tecnologías utilizadas (o en trámite de aprobación) que se pueden encontrar actualmente en la Argentina para el tratamiento de Residuos Patológicos son, entre otras:
Térmicas Incineración, radioondas, microondas
Químicas Cloro, derivados del cloro, desinfectantes
Radiación Rayos Gamma, UV, Infrarrojos
A esos procesos se le adicionan procesos mecánicos para su mayor efectividad y también irreconocibilidad de los residuos una vez tratados o previo al tratamiento, a saber, molienda, trituración, desmenuzado, compactación.